Estatua de Buda reclinada para jardín exterior en piedra volcánica de 50 cm de largo

Un símbolo de serenidad

El Buda reclinado es un importante motivo iconográfico del budismo, que representa al Buda Gautama durante sus últimos momentos antes de alcanzar el parinirvana, la muerte eterna.
Esta postura, también conocida como «Buda reclinado», simboliza la paz y la consecución de la iluminación.
La estatua de Buda Reclinado para jardín exterior es ideal para complementar un espacio de meditación o relajación.

Mantenimiento de la estatua

Las estatuas de piedra volcánica son robustas y requieren poco mantenimiento.
Para que tu estatua de Buda conserve su mejor aspecto, espolvoréala regularmente con un paño de algodón.
Para una limpieza más a fondo, utiliza agua templada y jabón suave.
Para reavivar el brillo de la piedra, aplica aceite natural, como aceite de coco o de oliva, con un paño de algodón.
Puedes utilizar un cepillo de dientes para llegar a las pequeñas grietas.

Ideas de decoración

Para una decoración armoniosa, integra esta estatua de Buda en un jardín exótico o zen.
Puede colocarse cerca de una fuente, rodeada de plantas exóticas o combinada con otros elementos, como farolillos japoneses, para crear un espacio propicio a la meditación.
Consulta también nuestra colección de estatuas de Buda para encontrar otras piezas únicas con las que embellecer tu jardín.

PREGUNTAS FRECUENTES

¿Qué tamaño tiene esta estatua de Buda? La estatua mide 50 cm de largo, 22 cm de alto y 12 cm de ancho.

¿Es adecuado para uso en exteriores? Sí, esta estatua de piedra volcánica natural está diseñada para resistir a la intemperie y puede utilizarse al aire libre.

¿Cómo mantengo la estatua? Límpialo con agua templada, jabón suave y un paño de algodón.
Utiliza un aceite natural para reavivar su brillo.

Instrucciones de uso

Coloca la estatua de Buda en un lugar estable y prominente, como cerca de una fuente o en un rincón de meditación.
Asegúrate de que esté bien colocada para evitar que se vuelque.
También puede realzarse con una iluminación discreta para crear una atmósfera nocturna relajante.

El Buda reclinado es un importante motivo iconográfico del budismo.
Es la representación del Buda Gautama durante sus últimos momentos de vida, antes de alcanzar el parinirvana, la muerte eterna.